“No tomen venganza, hermanos míos, sino dejen el castigo en las manos de Dios, porque está escrito: «Mía es la venganza; yo pagaré», dice el Señor.” – Romanos 12:19 (NVI)
El perdonar es un acto que proviene de nuestro deseo (tomar una decisión). Recientemente conversaba con una persona en la iglesia, quien me dijo: “Realmente, no siento (sentimiento que nace del corazón) el perdonar a mi amiga” – yo entendí que las emociones de esta persona se encontraban muy alteradas, y que su dolor aún era muy real. Pero, después de oír su historia, y de mostrar mi comprensión en cuanto a su situación, le recordé que el perdonar no es opcional. Es más, el perdonar es un mandamiento: “…de modo que se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.” – Colosenses 3:13 (NVI)
Corrie Ten Boom fue una mujer holandesa, quien en 1944 fue enviada a un campo de concentración nazi (por ayudar a personas judías a escapar hacia Holanda). Ella, al recordar el momento en que decidió perdonar a un guardia alemán, quien la tenía bajo su mando, nos comparte estas palabras, que son muy profundas: “El perdonar no es una emoción – esto yo ya lo sabía. El perdonar es un acto del deseo, y puede suceder sin importar la temperatura del corazón.”
Una clave en recibir el perdón que se nos ha dado, está en entender y aceptar el precio que Dios pagó por nosotros, y también por el pecado de otros. Él ha pagado por nuestros pecados con la sangre de Su Hijo. Esto quiere decir que, Dios es el único Juez… y, ¡Él no nos ha dado el poder de ser abogados! “No paguen a nadie mal por mal. Procuren hacer lo bueno delante de todos.” Romanos 12;17 (NIV) – Esto es lo que Pablo les dice a los Romanos. La venganza se trata de lastimar en respuesta a un insulto. ¿En cuántas películas (como Rambo) se nos muestra un ejemplo de venganza? Pero, la venganza es del Señor, no es nuestra. Nosotros no somos el instrumento de venganza que Dios usa. No tenemos el derecho para contraatacar a nuestros enemigos.
Finalmente, debemos de tener en mente que: Dios traerá justicia contra toda la injusticia. Él no dice, “olviden lo que sucedió”. Toda la Creación cantará de alegría cuando Él juzgue toda la tierra. “Canten delante del Señor, que ya viene a juzgar la tierra.” – Salmos 98:9(NVI) El Señor es poderoso para cumplir con su propósito. Él lo hará.
Tomemos el compromiso de perdonar a quienes nos han herido. Usted se sentirá muy bien al haberlo hecho.
Resting in forgiveness,
Bill
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